Hace poco más de un mes nació abogacía. La voz y la pluma de los juristas.A la par del trabajo editorial realizado para publicar este segundo número —cuya portada viste Claudia de Buen Unna, primera mujer que encabeza la casi centenaria Barra Mexicana, Colegio de Abogados—, hemos ido recogiendo los comentarios y sugerencias que desde diversos frentes nos han llegado; sin duda, nos permitirán enriquecer los contenidos, ampliar el abanico de temas abordados y dar cabida a nuevas voces interesadas en abordar temas de actualidad desde una perspectiva legal.
Entre las opiniones recibidas nos complace compartir la de don Sergio García Ramírez, una de las más autorizadas voces en el mundo jurídico de nuestro país, quien además nos honra con su presencia en el consejo editorial de la revista: “Han dado un primer paso adelante ‘con el pie derecho’, como se suele decir, a pesar de las restricciones que impone esta desdichada situación en la que nos hemos encontrado desde hace cerca de un año. Celebro la feliz iniciativa de lanzar una revista de esta naturaleza, que ofrece textos breves, útiles, con sentido práctico, y no compite con las revistas académicas tradicionales que sirven a otros propósitos, igualmente apreciables […] Me agrada y honra acompañarles en este esfuerzo”.
Asimismo, siguiendo la recomendación de otro de nuestros consejeros, don Elisur Arteaga Nava, apasionado constitucionalista que ha dedicado gran parte de su vida a la docencia, abrimos las páginas de la revista a los nuevos talentos que, desde las aulas, dejan oír su voz de estudiantes. Para el maestro Arteaga Nava, la formación de los profesionales del derecho no puede cimentarse en la escucha pasiva de una cátedra, en la formulación esporádica de alguna pregunta; la clave es el intercambio de opiniones, “pedir a los alumnos poner por escrito sus opiniones particulares, y, con reconocimiento de los créditos respectivos, enmendar juicios y, sobre la marcha, formular o reformular doctrinas”.
Nace, así, la sección “Nuevos talentos”, un espacio para promover el ejercicio de la escritura en el ámbito del derecho, convencidos de que al plasmar las ideas en papel se desarrollan habilidades profesionales que de otra manera difícilmente se obtendrían: estructura mental, pensamiento crítico, articulación de ideas, capacidad de investigación y argumentación, especialización y madurez, a la par de la exposición y el diálogo que conllevan arriesgarse a escribir una opinión y defenderla públicamente.
Con la intención de impulsar este esfuerzo, hemos considerado instituir el Premio Anual de Escritura a los Nuevos Talentos de la Abogacía, cuyas bases daremos a conocer próximamente. Se trata, por lo pronto, de una iniciativa que ha surgido a partir de la retroalimentación recibida a raíz de la publicación del primer número de abogacía. Algunas otras son la incorporación de una nueva sección que revisa la jurisprudencia y las tesis más relevantes del Poder Judicial de la Federación —un valioso recurso para la práctica jurídica—, una columna de opinión sobre el derecho desde una perspectiva económica, así como una aproximación histórica a los temas de actualidad. Todas las ideas son bienvenidas; este barco apenas está zarpando.
