Jaime Vázquez nos presenta algunas de las películas en las que la Independencia de México ha sido retratada como «enseñanza histórica, telón de fondo de vidas ilustres, patrioterismo, fuente de metáforas, leyenda o mito».
En 1904 Carlos Mongrand, francés que trabajó en México como documentalista y exhibidor, era conocido como “El rey de los cinematógrafos”. En esos años proyectó sus “episodios nacionales”, las “vistas” sobre personajes de la historia, entre ellos, Miguel Hidalgo y José María Morelos, interpretados en la pantalla silente.
El cine tomó sin rubor personajes, episodios, batallas e historias del movimiento independentista para contar la gesta. Diversos gritos libertarios se guardan en las filmotecas.
Los próceres Hidalgo y Morelos, héroes y símbolos, fueron homenajeados en las célebres Fiestas del Centenario organizadas por Porfirio Díaz en 1910, y los actores que los encarnaron desfilaron durante los festejos patrios que los documentalistas pioneros capturaron en el amanecer del siglo XX.
Felipe de Jesús Haro dirigió, escribió y protagonizó El grito de Dolores en 1907, con diálogos que actores ocultos detrás de la pantalla leían al público.
Los yucatecos Manuel Cicerol y Carlos Martínez emprendieron en 1916 la aventura de 1810, argumento de Arturo Peón, con Alfredo Varela como el padre Hidalgo.
Miguel Contreras Torres, de trayectoria en el cine mudo, dirigió en 1934 ¡Viva México! (El grito de Dolores). El español Paco Martínez fue Hidalgo y Sara García se vistió de Josefa Ortiz de Domínguez.
En los cuarenta Contreras Torres, inclinado al cine histórico, realizó El padre Morelos y El rayo del sur, con Domingo Soler como Morelos.
Julio Bracho tomó una historia de René Capistrán para La virgen que forjó una patria (1942), fresco insólito que cruza siglos para que Hidalgo (Julio Villarreal) le cuente a Allende (Ernesto Alonso) las causas del movimiento. Un estandarte guadalupano recorre el tiempo.
Antonio Eceiza llegó de España en los setenta. Dirigió en 1976 Mina, viento de libertad. El guerrillero navarro que luchó a favor de la independencia es José Alonso y Héctor Bonilla es Fray Servando.
La vida de Gertrudis Bocanegra es contada por Ernesto Medina en Gertrudis (1991). Ofelia Medina da vida a la independentista nacida en Pátzcuaro.
En la conmemoración del bicentenario de la Independencia, Carlos Kuri dirigió la cinta de animación Héroes verdaderos, con guion propio y de Riley Roca. Son las aventuras de un criollo y sus amigos indígenas envueltos en el levantamiento.
Antonio Serrano dirigió en 2010, coescrita con Leo Eduardo Mendoza, Hidalgo, la historia jamás contada. Demián Bichir interpretó al padre Hidalgo y Andrés Palacios al cura Morelos. Serrano y Mendoza volvieron a la carga con Morelos (2012), ahora interpretado por Dagoberto Gama.
El bicentenario de la independencia, en un rincón de la patria, se convirtió en sátira política para Luis Estrada en El infierno (2010).
Estamos en nuestra butaca: en El rayo del sur, Morelos y sus independentistas atestiguan en el Congreso de Chilpancingo la lectura de los Sentimientos de la Nación. En la voz de Manuel Bernal, el “declamador de América”, escuchamos los puntos nodales que Morelos tomó de los Elementos Constitucionales de López Rayón y de la visión de Andrés Quintana Roo. Lecciones de historia patria envueltas en proeza.
El cine ha visto la gesta de independencia como enseñanza histórica, telón de fondo de vidas ilustres, patrioterismo, fuente de metáforas, leyenda o mito.
La pantalla y la vida misma esperan películas y realidades a la altura de esa epopeya que nos dio identidad.
