La Comisión de Jóvenes Barristas de la Barra Mexicana, Colegio de Abogados, y abogacía®, hemos sumado esfuerzos para crear un espacio en el que podamos presentar los perfiles de las abogacías emergentes que están repensando la profesión y ayudando a impactar positivamente a sus comunidades y a sus entornos inmediatos. Estamos convencidos de que la abogacía se inserta, como cualquier otra profesión, en contextos determinados para servir a su comunidad; en este sentido, la visión del quehacer social juega un profundo rol en la consolidación del Estado de derecho, la construcción de la democracia y la generación de entornos propicios para los derechos humanos y la paz. Buscamos que este sea un espacio de convergencia y diálogo que detone la construcción de comunidades de abogacías conscientes y responsables con su entorno.
Como abogada, me encuentro en un México dividido, profundamente lastimado, al que le adolece su niñez, sus pueblos indígenas, sus desaparecidos, las muertas. Es un México en el que los ciudadanos exigimos una profunda transformación de las instituciones y de los procesos. Vivimos en un país que nos exige una revolución pacífica –de pensamientos y de academia de debate–. Un México que nos exige ser incluyentes y profundizar y llevar a cada uno de los rincones, nuestras ideas, la innovación y lo necesario para construir un país mejor
María Fernanda Ledesma Eriza
María Fernanda es licenciada en derecho por la Universidad Iberoamericana, Ciudad de México, de donde se tituló con el premio al mérito extraordinario “Ministro José de Jesús Gudiño Pelayo”. Actualmente se desempeña como directora de Enlace y Apoyo Regional en materia de radio y televisión, Servicio Profesional de Carrera y directora administrativa y de difusión en la Dirección General de Comunicación Social de la Secretaría de Gobernación.
María Fernanda tiene una amplia trayectoria en el activismo por los derechos humanos. Es la fundadora de la asociación Leer para no caer, A.C., desde donde lideró la fundación de la primera biblioteca comunitaria en el municipio de Cocula, Guerrero; promovió campañas para romper estereotipos de género; gestionó recursos para crear jardines botánicos en las escuelas donde se desarrolla el programa, con la fauna propia del estado, para crear espacios propicios para el aprendizaje. Aunado a lo anterior, María Fernanda diseñó el proyecto La justicia olvidada, el cual se integra a las 3 etapas del proceso de prevención del delito, enfocándose en la tercera dentro de los centros de cumplimiento de medidas para menores infractores.
El trabajo que ha desarrollado con perspectiva social de María Fernanda, la ha llevado, no únicamente a ser una prestigiada abogada, sino a ser reconocida por el impacto que ha tenido en su comunidad. En 2017 fue nominada al Premio Nacional de la Juventud, en la categoría Distinción Compromiso Social; en 2016 fue condecorada con el premio al mérito juvenil “José Azueta”, otorgado por el Gobierno del estado de Guerrero; también fue galardonada con el Premio Ibero Compromiso Social BREMOND-FICSAC, en la categoría “Apoyo a Jóvenes y Adultos Mayores en situación vulnerable”, otorgado por la Universidad Iberoamericana, la Fundación Bremond y por el patronato de Fomento de Investigación y Cultura Superior A.C.
Su trabajo y opiniones se pueden seguir en «Los puntos sobre las íes…10 mujeres opinan», periódico en línea, donde es columnista.
